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Tipos de comunicación
Comunicación interna
Leo: Adelante con estos principios de comunicación, Daniel.
Daniel: Perfecto. Lo primero que tienes que distinguir es entre la comunicación interna y la comunicación interpersonal. Son dos tipos de comunicaciones que se complementan.
La comunicación interna se refiere a los significados que nosotros adjudicamos a los eventos, a los hechos, a las experiencias; son los mensajes que nos repetimos a nosotros mismos de manera constante. Pueden ser frases, puede ser el vocabulario que empleamos, preguntas que nos hacemos constantemente.
Y dependiendo de la comunicación que manejemos a nivel interno va a ser la calidad de la comunicación que podamos ofrecer a las demás personas. Anthony Robbins dice que nuestra comunicación define la calidad de vida que tenemos.
Ese es el nivel de peso que tiene la comunicación que empleamos día a día, tanto interna como interpersonal. Lo platicábamos la vez pasada que participé en el programa. Como una respuesta a un compañero de trabajo que saludamos y no nos responde, podemos darle diferentes interpretaciones.
– Tony Robbins
Ahí estamos hablando de comunicación interna. Si decimos buenos días y no nos contesta, podemos decir me está faltando al respeto, me está ignorando.
Esas son posibles interpretaciones que podemos hacer. Otra comunicación interna que podemos manejar es decir está ocupado, esta distraído, no nos escuchó. Entonces eso emocionalmente nos va afectar de una forma muy distinta.
Comunicación interpersonal
Por lo tanto, la comunicación interna va impactar enormemente la comunicación interpersonal. La (comunicación) interpersonal tiene que ver con las palabras, los tonos que empleamos, la forma de expresarnos. Ese es otro cuento en el que entraremos ahorita.
Ustedes me pueden detener en cualquier momento, porque me emociono y me extiendo demasiado.
Leo: Aparte te vamos a salvar porque con eso que estas un poco mal de la garganta, definitivamente hay que salvarte para que no hables tanto para que no la forces.
Daniel: Sí, por favor. (Risas).
Leo: Es muy interesante esto de lo que hablas. Yo nunca había oído lo de Tony Robbins, lo que dice que la calidad o el nivel de comunicación que tengas es el nivel de vida que tienes. ¿Por qué podemos considerar esto, Daniel?
Daniel: Porque definitivamente si tomamos en cuenta los dos tipos de comunicación, la comunicación interna, por ejemplo. La comunicación interna tiene que ver con nuestra auto imagen, nuestra autoestima no solamente cómo evaluamos los eventos sino cómo nos vemos a nosotros mismos.
Si tenemos una imagen negativa de nosotros mismos seguramente estamos manejando un vocabulario y una comunicación interna negativa. Haciéndonos preguntas como, “¿Por qué siempre cometo errores?”, “¿Por qué no logro mis objetivos?”, “¿Por qué soy un fracasado?”
Ese tipo de comentarios o palabras con mucha carga negativa que pueden ser desde altisonantes hasta auto denigrantes como “soy un tonto, no sirvo para nada”. Afirmaciones que repetimos constantemente.
Peso químico de las palabras
Leo: Daniel, yo les decía algunos días pasados a las personas que el universo te lee la intención de tus palabras. Es decir, por ejemplo, como dices tú, si estás haciendo algo y cometes un error y te dices “Ay que wey soy.” Pero yo, la verdad como yo pienso yo no creo que el universo diga “Ah okey si eres un tonto y vas a actuar de aquí adelante como tal.”
Yo creo más bien es la intención que le das tú a la forma. Nuevamente, es cómo te comunicas, las palabras ciertamente tienen un peso, un poder, pero siento que es más fuerte todavía la intención con que las dices.
Por ejemplo, tú le dices a tu hijo o a tu hija, “Ay mira nada más, todo el tiempo te andas cayendo”. Sé que es en cotorreo, pero sé que también puedes dejar una huella muy fuerte en ellos. Pero es diferente a decirles, “¡Ay, como eres #%/$! ¡Todo el tiempo te andas cayendo!”.
O sea, siento como que la intención en esta ocasión, bueno en la forma que nos expresamos, en la que nos comunicamos es la que verdaderamente tiene el peso en sí, más que las palabras, Daniel.
Daniel: Si desde luego. Las palabras tienen un impacto químico en nuestro organismo. Desde luego va a ser mayor el impacto si van con una carga emocional, como la que estas mencionado. No es lo mismo “ah, que tonto eres» a «¡eres un tonto, no sirves para nada!’’.
Ese tipo de expresiones o palabras van a activar en nuestro cerebro la producción de neurotransmisores que nos van a hacer sentir mal. Nos van a activar químicamente de una forma negativa. Lo recomendable es evitar ese tipo de vocabulario dentro de lo posible.
Leo: Decíamos el peso de las palabras tienen mucho que ver como lo dices, como lo manifiestas, Daniel y también estamos diciendo esto que es muy importante cómo te comunicas contigo es también la manera de la que como te vas a comunicar interpersonalmente con otras personas, Daniel.
La comunicación interna y nuestras relaciones interpersonales
Daniel: Hablábamos de como la calidad de nuestra comunicación es la calidad de nuestra vida ¿cierto? Decíamos que nuestra comunicación interna, el cómo nos veamos a nosotros mismos, los mensajes que repitamos constantemente sobre cómo nos vemos, qué pensamos de nuestra persona.
Va a impactar los resultados de nuestros esfuerzos o en qué nos enfocamos, qué ambicionamos, las metas que nos proponemos si es que nos proponemos metas.
Porque una comunicación interna podría ser, nunca logro nada, no tiene caso que me esfuerce, voy a quedarme siempre donde mismo, ese es un ejemplo de comunicación interna.
Otro ejemplo de comunicación interna puede ser, yo lo que me propongo lo alcanzo, solo necesito prepararme, necesito estudiar, si busco la manera la encuentro. Ese es otro tipo de comunicación interna.
Desde luego, esto va impactar la comunicación interpersonal, el cómo nos relacionemos con las demás personas. Si la comunicación, nuestra comunicación nos ayuda a tener buenas relaciones interpersonales, nuestra calidad de vida va a ser muy distinta.
Y si manejamos una comunicación que nos lleva a tener conflictos constantemente con las personas que nos rodean o a meternos en problemas constantemente, también.
Johnny: Daniel, a ver déjame ver si entendí. Entonces para tener una buena relación tenemos que aprender a comunicarnos internamente ¿verdad? digo, internamente interna de nosotros.
Daniel: Sí, desde luego la comunicación interna va impactar como nos relacionamos con las demás personas. La comunicación interna puede hacernos una persona ecuánime, tranquila, centrada o también puede influir en que seamos reactivos, estemos a la defensiva, que seamos agresivos en las relaciones que entablamos. Eso definitivamente va a tener un impacto muy fuerte.
Una persona más ecuánime, más tranquila, se toma diez segundos para evaluar lo que escuchó y para elegir entre varias opciones, la mejor respuesta . Como el ejemplo que poníamos del compañero que no contestó el saludo ¿cómo lo manejo? ¿cómo lo interpreto y cómo respondo?
La comunicación, decretos y afirmaciones
Decretos
Leo: Así es. Mónica Edith dice, el poder de la palabra es muy fuerte – aquí te voy hacer una pregunta al respecto desde tu punto de vista clínico, científico, Daniel – dice ella, el poder de la palabra es muy fuerte por eso nunca declares con palabras aquello que no quieres que suceda.
Ahora, cuando tú declaras lo que tú quieres que suceda, no todo el tiempo sucede o sea y no lo haces, bueno en mí caso por supuesto, no necesariamente. En ocasiones sí lo hago pero no todo el tiempo lo hago, si lo hago con el corazón, lo hago con una convicción y con una fe pero sin embargo no sucede.
Por lo menos no sucede, por lo menos, a lo mejor la cuestión es que quiere uno la satisfacción instantánea, a lo mejor uno lo pide a gritos o lo externa uno y ya quiere que mañana se empiece a materializar, bueno por lo menos una semana, pero se lleva mucho tiempo y de hecho en muchas ocasiones le dices a Diosito, oye, te acuerdas aquello que yo te dije, yo te pedí? Échame la mano con eso, ¿no? y sigue sin pasar.
¿Qué tanto le hace caso a uno el universo o simplemente la intención de nosotros de pedir algo o decir algo? ¿Qué tanto le hace caso el hacerlo de forma positiva, es decir quiero que suceda esto o hacerlo de forma negativa no quiero que pase esto desde tu punto de vista científico desde la psicología, Daniel?
Daniel: Son dos temas ahí, son dos puntos. Uno, el tema relacionado con los decretos y las afirmaciones que tienen un tono, un sentido algo cósmico, espiritual para muchas personas, donde el universo conspira a nuestro favor dependiendo cómo nos expresemos de manera constante.
Las afirmaciones y los decretos, desde el punto de vista de la psicología, van a guiar tu enfoque y tu enfoque va guiar tus esfuerzos.
Es decir, si te propones, por ejemplo quiero comprarme un carro nuevo vamos a poner ese de ejemplo, quiero un carro nuevo y lo ves así de manera espiritual, cósmica pidiéndole al universo quiero un carro nuevo muy probablemente ese enfoque te va a llevar a esforzarte en esa dirección.
A tu cerebro lo estas programando para que busque una solución a ese planteamiento. Es decir, vas a ahorrar dinero, vas a buscar cómo generar más dinero, vas a buscar posibilidades de crédito o vas a buscar opciones. Es decir, tu enfoque se va a guiar en esa dirección y es más que nada como los decretos funcionan.
Si dices un decreto y te sientas en el sillón y esperas que las cosas sucedan por sí solas pues difícilmente no, no funcionan tanto así, al menos desde el punto de vista de la psicología.
Afirmaciones
Y la otra pregunta que me hiciste respecto a qué es mejor, si decimos ya no quiero fumar o mejor decir quiero vivir más saludablemente, o quiero un cuerpo más saludable.
Se dice que la mente o el cerebro no identifica el no, no identifica el negativo. Entonces si dices no quiero fumar, no quiero fumar lo que el cerebro está identificando es quiero fumar y estas manteniendo presente en tu mente el fumar.
La mejor forma de interrumpir un hábito es sustituyéndolo con otra actividad que sería, por ejemplo, quiero hacer ejercicio. El ejercicio excluye fumar, para la mayoría de las personas ¿no? hay personas que están levantando pesas y fumándose un cigarro, estamos hablando de casos extremos.
Johnny: Yo lo que digo que hasta ahorita me estoy dando cuenta porque digo este fin de semana no voy a tomar (Risas) y que crees que pasa (Risas).
Daniel: Traigo un par de puntos sobre lo que hace a un comunicador efectivo, no sé si quieren que les comparta esa parte.
5 pasos para ser un comunicador efectivo
Contar con una gama de opciones
Leo: ¡Oh, eso sería fabuloso! Entonces ¿Cómo ser un comunicador efectivo, Daniel?
Daniel: Número uno, hay que contar con una gama de respuestas. Es decir, ante un estímulo, ante un evento, ante una pregunta, algún comentario de otra persona o en una conversación. Antes de responder necesitamos elegir entre una gama de respuestas.
Volviendo al ejemplo del compañero que no nos regresa el saludo, ahí estamos hablando de una comunicación interpersonal. El silencio de él es la respuesta a nuestro saludo, entonces ¿cómo lo voy a manejar? ¿me voy a molestar? ¿le voy a contestar algo de acuerdo a esa molestia? O ¿voy a tomarlo como que se distrajo?
Habilidad para elegir la mejor respuesta
Y para esto se requiere también la habilidad de seleccionar la mejor respuesta de acuerdo al momento, a la situación y a tus objetivos.
Y en el caso de las relaciones, de una relación matrimonial, por ejemplo, decimos ¿Quieres tener la razón o quieres ser feliz? Esa es una pregunta que debemos plantearnos antes de entablar una discusión.
Muchas veces en una relación de pareja nos empeñamos o nos obsesionamos con tener la razón y destrozar los argumentos de la otra persona, pero muchas veces al costo de la relación.
Perdemos de vista el objetivo. El objetivo de la relación matrimonial, de la relación de pareja, en general va a ser el estar bien con tu pareja. Estar tranquilos, estar contentos, en armonía.
Y como se pierde de vista el objetivo en ese contexto o también en cualquier otra situación social vamos a tener dificultad para elegir la mejor respuesta.
Leo: Sí, de hecho así como dices, por ejemplo cómo ser un comunicador efectivo, no necesariamente estamos hablando de ser un comunicador como Johnny como yo o como tú en este caso que estamos siendo parte de esta plataforma si no simplemente comunicarte efectivamente con cualquier persona en el día a día.
Daniel: Con tu familia, tu pareja, tus hijos, tus compañeros de trabajo.
Empatía
Bueno, el siguiente punto que necesita un buen comunicador es empatía. La capacidad de ser empático, la capacidad de ponerte en los zapatos de la otra persona. La capacidad de tomar en cuenta los sentimientos y la perspectiva de la otra persona.
Leo: Yo te voy a hacer una pregunta que tal vez no te va a caer muy bien, Daniel. Entiendo lo de la empatía y sé que es muy importante pero ¿cómo logras ponerte en los zapatos de otra persona? Yo ahí si lo veo medio difícil, eso de ponerme en los zapatos de alguien más.
Daniel: Sí, es decir para ponerte en los zapatos de otra persona necesitas hacer un ejercicio de imaginación para poder asumir la perspectiva de tu interlocutor, de con quien tu estas platicando, parlando.
Leo: Lo que sí me costaría mucho trabajo y no creo que lo pueda yo hacer, es decir, es que yo sé lo que tu estas sintiendo es que yo puedo estar en tus zapatos o sea puedo sentirme en tus zapatos creo que ahí sí no podría lograr eso en mi, querido Daniel y mis amigos
Daniel: Sí, pero no estamos diciendo que la empatía es sentir lo que la otra persona sienta o afirmar o asegurar que tú sientes lo que la otra persona siente.
Es imaginarte lo que la persona está sintiendo y muchas veces es tan grave la situación de la otra persona que tan solo puedes decir, ni siquiera me puedo imaginar lo que estás sintiendo tratándose de alguna perdida de un ser querido o algún tipo de malestar, de enfermedad terminal o crónica y no puedes decir yo sé lo que estas sintiendo.
La empatía se trata de tomar en cuenta la perspectiva y de tomar en cuenta los sentimientos de la otra persona, no hacer como que los estamos sintiendo.
Leo: Ok, eso tiene mucho sentido. El simple hecho de decir o imaginarte por ejemplo cómo podría sentirse esa persona o como la está pasando; los sentimientos, los pensamientos, el ser empático hacia ellos y sin juzgar eso es algo muy importante.
Daniel: El cero juicio, el no juzgar es básico, es fundamental porque eso nos va a dar la apertura; nos va a facilitar el usar la imaginación para ponernos en los zapatos de la otra persona.
Automonitoreo
El otro punto es auto monitoreo. Es muy importante auto monitorearse cuando estamos hablando, cuando estamos comunicándonos con otra persona u otras personas. Necesitamos estar monitoreando nuestro tono de voz, nuestro vocabulario y monitorear nuestra comunicación no verbal es decir, nuestros gestos, nuestros ademanes, nuestra mirada.
Muchas veces tenemos fruncido el ceño porque algo nos molestó y no nos damos cuenta que estamos frunciendo el ceño, que estamos haciendo un gesto agresivo o triste o de distracción.
Entonces estamos enviando una señal no positiva a la otra persona que nos está observando. También es importante monitorear cómo nos está impactando internamente la conversación ¿Estamos tensándonos? ¿estamos poniéndonos tristes? ¿nos está molestando algo?
Si no nos monitoreamos podemos empezar a alzar la voz o manejar de otra forma la situación; de una forma menos productiva la conversación.
Compromiso con la relación
El otro punto es el compromiso con la relación. Tienes que tomar en cuenta el compromiso con la relación. Con quién estas platicando, con quién estas conversando ¿qué tan importante es la relación para ti?
Si no se toma en cuenta la importancia de la relación podemos decir cosas hirientes, cosas fuera de lugar que van a afectar esa relación en el mediano o largo plazo.
Conclusión
Resumiendo, los puntos son
- Contar con una gama de respuestas.
- Tener la habilidad para elegir la mejor respuesta de acuerdo al contexto, de acuerdo a la situación y de acuerdo a tus objetivos
- Ser empáticos.
- Auto monitorearnos y,
- El compromiso con la relación.
Leo: Perfecto. Pues bueno, la verdad me quedé con muchas preguntas. Sé que tienes compromisos ya preestablecidos así es que te agradecemos muchísimo que estés con nosotros y nuevamente por supuesto la invitación para que muy pronto estés con nosotros y volvamos a tocar uno de estos temas tan importantes para nuestra humanidad.
Daniel: Claro que sí, muchas gracias a ustedes por recibirme, hasta luego.
