003 – Cuando Ir a Terapia de Parejas y Cómo Funciona

Conoce cuándo ir a terapia de parejas y cómo funciona, cuál es el rol del terapeuta, cuándo se recomienda una separación, si vale la pena ir uno solo a consulta y más...
cuando ir a terapia de parejas

Transcripción:

Adrián: Como les anticipé al inicio del programa, hoy estaremos platicando sobre por qué la gente acude a terapia de parejas. La terapia en pareja… Si la terapia en pareja puede resolver los problemas del matrimonio, o incluso puede afectarlos. Para hablar sobre esto, nos acompaña Daniel. Daniel ¿cómo te va? Muy buenas tardes.

Daniel: Muy bien, Adrián. Muy contento de estar aquí con ustedes, como siempre.

Cuándo va una pareja a terapia de parejas

Adrián: Pues nosotros mucho más contentos de tenerte por aquí. Daniel ¿Qué lleva a una pareja a acudir a terapia? ¿Están acudiendo las parejas? ¿Y esto verdaderamente les puede funcionar o no siempre? Empieza.

Daniel: Sí, sí. Bueno, te voy a decir por qué acuden normalmente ahorita ¿verdad? hoy en día. Así es, porque también está el por qué deberían acudir o cuándo deberían acudir.

El 90% de las parejas que acuden a terapia de parejas, exactamente hablando, van cuando tienen ya los problemas, ya están siendo rebasados por una problemática, llámese de comunicación, llámese de distanciamiento, llámese de cómo manejar a los hijos, llámese de un caso de infidelidad, de muchos (otros) temas.

Hay un sin fin de temas que ocurren en la dinámica de la pareja. Y la mayoría van cuando ya están siendo rebasados, y muchas veces cuando ya es muy difícil reversar el daño que se ha generado en la relación. Lo que yo recomendaría…

Y bueno, y hay un 10%, 15% que van de manera proactiva, por iniciativa propia y dicen Queremos hacer algunos ajustes en nuestra relación, algunas pequeñas diferencias como que quieren surgir y queremos pulir esa parte ¿no? Cómo comunicarnos mejor, cómo prevenir futuros problemas y yo les aplaudo cuando llegan ese tipo de parejas conmigo, les aplaudo ¿no? porque…

¿Por qué? Porque están evitándose dolores de cabeza muy fuertes, probables separaciones o divorcios en su futuro, y garantizan la prolongación de esa relación ¿verdad? de una manera sana y satisfactoria para ambas partes.

Adrián: Y en la realidad, Daniel ¿Cómo es que están llegando estas parejas? ¿Están llegando a tiempo? ¿Están llegando ya en un momento tardío? Tú como especialista en terapia de parejas.

Daniel: Pues hay tres etapas en las que llega la pareja ¿no? Te digo, bueno diría cuatro: Cuando van y quieren crecer como pareja y aprender para evitar problemas; Otra etapa sería cuando empiezan los problemas, pero que inmediatamente dicen Hay que ver, hay que arreglar esto desde ya, antes de que se salga de control; Van cuando el problema ya está avanzado, pero todavía se puede aliviar.

Y también van cuando ya, o sea, las posibilidades de que se componga, de que se recupere la relación, de que se sane la dinámica, son más difíciles; no imposibles, sino difíciles, mucho más difíciles, porque también hay que tener cuidado de eso ¿no? Ningún terapeuta, quiero subrayarte, ningún terapeuta de pareja y ningún terapeuta en general puede decirte si la relación ya no va a funcionar. No somos magos y es muy anti-ético decirte Tu relación ya no tiene caso. 

Ningún terapeuta de pareja y ningún terapeuta en general puede decirte si la relación ya no va a funcionar.

Adrián: Y en cada una de estas etapas ¿Qué es lo que va a suceder? Digamos, antes de que empiecen los problemas ¿Qué es lo que esta pareja va a encontrar? ¿Por qué acuden regularmente? ¿Cuál es el detonador? ¿Cuál es el motivador para que vayan digamos en estas cuatro principales características que tienen las parejas cuando empiezan a buscar, pues, tener una terapia o tener un acercamiento a alguien más que pueda guiarlos? En esta primera fase ¿Qué buscan? ¿Qué los motiva? y ¿Qué es lo que van a encontrar, Daniel?

Daniel: Podríamos decir que en las primeras dos fases, que una es en la que quieren aprender como personas y como pareja, y crecer para manejar situaciones y retos que se presenten en el futuro; en estas etapas hay mucho amor, y están abiertos al conocimiento y a apreciar mejor a su pareja y apreciar las diferencias que hay entre los géneros ¿no? entre hombre y mujer principalmente.

En la segunda etapa, que empiezan los problemas también, todavía normalmente. El detalle está en que cuando dejamos que los problemas se profundicen y agudicen, surge o se profundiza también el resentimiento, entonces mientras más avanzado está el problema, más reacias están las partes a poner de su parte o a colaborar.

Adrián: Pero eso es cuando ya hay un conflicto ¿no? O sea, podríamos decir ¿Hay quienes van como de una manera profiláctica, de una manera preventiva a terapia en pareja?

Daniel: Sí, te comento, son los menos, estamos hablando de un 10% o quizás menos de las parejas que me visitan. La gran mayoría van cuando ya están al borde de, que dicen Ya estoy harto, ya estoy harta, ya no soporto esta situaciónes cuando la mayoría van, y yo lo que recomiendo es: ve cuando empiece el problema ¿no? cuando veas que está empezando

Pero todavía tenemos en la cultura esa creencia o esa visión del terapeuta como nada más las personas que están desequilibradas mentalmente o que tengan un problema muy profundo, van ¿no? Pero bueno, a mí me gusta verme a mí mismo, como trabajo en terapia de parejas, me gusta verme más como un asesor que como un terapeuta psicólogo.

 Adrián: Es decir, se podría tomar terapia en pareja de manera preventiva, es más, se debería.

Daniel: Definitivamente, haz de cuenta, me gusta verme a mí como esos empresarios que van con un profesional de los negocios a ver cómo arrancar bien un negocio. No van porque tienen ya problemas en la empresa ¿Me explico?

Adrián: Así es.

Daniel: Así me gusta verme a mí. Que las parejas acudan porque quieren arrancar bien su relación, no porque ya el barco se anda queriendo hundir.

Adrián: Pues ese sería el ideal. Pero ¿qué te parece si regresamos? Vamos a hacer una pequeña pausa y regresamos a buscar un poco sobre cuáles son las diferentes fases en las que llegan y a qué se van a enfrentar, qué van a encontrar en las diferentes terapias o con los diferentes terapeutas.

Daniel: Ok. Bien. Excelente.

Adrián: Vamos a hacer una pequeña pausa, esto es Baja por tu salud, y volvemos.

Diferentes tipos de terapeutas (que hacen daño)

Adrian: De vuelta, de vuelta, platicando sobre la terapia en pareja. Daniel ¿Qué es lo que van a encontrarse las parejas? ¿Qué tipos de terapeutas van a descubrir en este proceso en el que busquen ayuda?

Daniel: Ok, esa es una pregunta muy importante porque allá afuera habemos de todo tipo de terapeuta ¿no? con diferentes fortalezas, con diferentes especialidades y con diferentes enfoques y métodos para trabajar.

Esto va a ser determinante en qué tanto como terapeuta puedo yo ayudar a un matrimonio que está, sobre todo, que está en problemas ¿sí? Te estaba platicando hace un momento, que existen… Esto es un verdadero problema porque, igual que con otras profesiones, en que un profesionista se dice que te puede ayudar, llámese doctor, llámese abogado, llámese mecánico, llámese lo que gustes, a la mitad del camino te das cuenta de que a veces hizo más daño que la ayuda que te prometió.

En la psicoterapia de parejas también se da el mismo problema ¿ok? Por eso es muy importante que la pareja que busca ayuda o el individuo que busca ayuda para su matrimonio verifique que la persona con la que acude, tiene entrenamiento en terapia de parejas específicamente y tiene experiencia en terapia de parejas.

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Josefina: Claro porque, imagino que si acude una pareja y a lo mejor el psicólogo terapeuta está de acuerdo con el varón, ah bueno, ese psicólogo va a ser el que le va a encantar a él, pero si buscan, no sé, alguna otra persona para comparar, para ver, buscando, y resulta que ese psicólogo apoya más ahora a la mujer, pues ahí van a entrar otra vez en problemas.

Daniel: Sí. Y las personas se dan cuenta inmediatamente si el terapeuta está cargándose para uno o para otro lado ¿no? y en ese momento ya la terapia deja de ser efectiva y ese problema, no nada más, no solo es en México, sino también se empezó a subrayar y señalar en Estados Unidos, al grado que dos de los principales terapeutas de parejas lo han mencionado en sus artículos y libros, llámese Weiner-Davis, llámese Doherty, y mencionan en particular cuatro tipos de terapeutas que hacen daño:

El terapeuta que se especializa en lo individual

El terapeuta que se especializa en lo individual y que cree que está haciendo terapia de pareja porque tiene dos personas en su consultorio nada más, pero se va más por el explorar a cada uno de manera individual, más que enfocarse en el problema que está pasando, que está enfrentando en términos inmediatos la pareja ¿no?

Adrián: Es decir, este terapeuta estará dando una terapia individual y viendo como dos historias diferentes, pero que más bien la historia que debería estar viendo es la historia en conjunto.

El terapeuta neutral

Daniel: Y sobre todo la interacción. Luego está el otro terapeuta que es el que dice ser neutral, y que hace preguntas como ¿Qué vas a ganar si te quedas y qué vas a ganar si te vas? Ese tipo de enfoque hace daño porque muchas veces llegan a tu consultorio y una de las dos partes ya tiene un pie afuera, y casi casi llega por el visto bueno del profesional para decir Ah sí, está bien que te divorcies; Ah sí, está bien que te separes.

Entonces si tú a esa persona le planteas ¿Qué ganas si te vas? ¿Qué ganas si te quedas? Claro que va a tener más argumentos para irse que para quedarse ¿no?

Adrían: Entonces ahí ¿qué intervención va a dar el terapeuta?

Inevitablemente se está inclinando hacia la persona que se quiere ir del matrimonio. No está ayudando a la relación. O sea, va a acelerar simplemente, o va a dar el visto bueno para la persona que se quiere ir, va ayudarle en ese sentido.

Adrián: Es decir, va a, en vez de evitar o generar o buscar motivos para que no se dé…

Daniel: Le va a dar ese empujoncito que necesita.

Adrián: Tienes razón, sí.

Daniel: Ah, ganas más con irte, pues está bien, vete ¿no? Porque soy neutral, pero esa es tu decisión, está bien.

El terapeuta etiquetador

Y luego está el otro, que es el Etiquetador. Llegas tú solo a consulta y te empiezas a quejar de tu esposa, y siempre es una visión unilateral, cada uno tiene su versión, su narrativa, cada una de las partes, y tú me platicas tu parte y me dices qué te dice y te grita y te maltrata y te explota, y yo te compro toda esa narrativa y te digo Ah, es que tu señora es una narcisista.

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Y empiezo a emplear términos clínicos que la catalogan, la etiquetan, y ya tu te vas con esa visión de Ah, es que estoy con una narcisista, por eso tengo estos problemas, tú eres el problema, el psicólogo me dijo que tú eres el problema Y ya, ahí ya se cargó la balanza otra vez. No estamos ayudando a la relación.

El terapeuta que socava el compromiso

Y finalmente está el que socava el compromiso con preguntas como Pues si no estás feliz allí ¿Qué estás haciendo ahí? Entonces eres un tonto si sigues ahí ¿no? ¿Qué haces ahí si no estás contento o contenta?

Adrián: Es decir, entonces el terapeuta debe de tomar una postura imparcial, pero ¿Cómo hace el terapeuta para ponerse en ese punto imparcial?

El rol del terapeuta de parejas

Daniel: Como dice una de mis maestras, yo le digo a mis clientes: Mi cliente es la relación, ni tú ni ella, la relación. Y sobre todo cuando ya hay una familia ¿no? cuando ya hay hijos de por medio, hay que hacer énfasis en la relación.

Entonces lo que yo busco revisar es la interacción que hay entre ambos, qué está generando ese conflicto, y cómo romper esos patrones en los que ellos caen. Y validando, desde luego, validando ambas posturas, porque la verdad es que la mayoría de las veces los dos tienen razón, pero no hay puentes en los que se encuentren y se terminen de entender mutuamente.

Mi cliente es la relación; ni tú ni ella, la relación. Y sobre todo cuando ya hay una familia.

Adrián: Pero ¿Y qué hace el terapeuta en el momento en que sí, realmente, hay alguna tendencia, como la que tú decías del que está rompiendo la relación, del que está tomando quizá alguna postura, pero que, sí, uno de los dos tiene una actitud x ó y, pero que sí está siendo nociva? ¿El terapeuta lo debe de destacar? ¿Debe de explicarle Oye, estás teniendo esta actitud, estás actuando de esta o esta otra manera y estás afectando tu matrimonio? ¿O ahí tampoco vale la pena que se involucre?

Daniel: Obviamente, si ves una conducta que no está funcionando, pues hay maneras de decírselo al cliente y decírselo de una manera que ayude a la relación y no que haga que el cliente diga Ah ¿estás diciendo que yo soy el problema? ¿Sí me explico?

Tienes que manejar muy bien el lenguaje y tu posición, porque fácilmente se malinterpreta que estás favoreciendo o dándole la razón a una de las personas ¿no? Los cuatro tipos de terapeuta que te mencioné, son enfoques que no ayudan a una relación.

Adrián: Pero ¿Cómo ser imparcial realmente si hay alguna situación que esté realizando alguno de los dos o que esté actuando de alguna manera que sea nociva?

Cuándo se recomienda una separación

Daniel: Mira, hay dos o tres situaciones en las que yo definitivamente recomiendo la separación: violencia, abuso de drogas o alcoholismo, que llevan generalmente a violencia ¿no? o que ya está la salud o la vida en riesgo de alguno de los miembros de la familia, ahí sí definitivamente voy a recomendar una separación.

Adrián: ¿Una separación determinante?

Daniel: No, puede ser una separación temporal, pero que no estén bajo el mismo techo, porque están corriendo, o uno de los dos está corriendo el riesgo ya de vida o muerte en muchas ocasiones.

Adrián: ¿Entonces tú ahí recomendarías que la pareja se separara? O sea ¿Esos serían los puntos en los que ya sabes que nos separamos, cada quién por su lado, tú tienes que enfocarte en esto y esto…?

Daniel: Ajá, pueden separarse y se puede seguir trabajando en la relación. Se separan un mes, dos meses, tres meses, un año… y se sigue haciendo el esfuerzo por resolver esos problemas; pero claro, no se va a terminar de ayudar al 100% de las parejas, eso es un hecho, porque hay personas que no van a estar dispuestas a cambiar, y se van a quedar casadas con lo que están haciendo y cómo lo hacen y en sus criterios.

Adrián: O sea ¿Tú estarás guiando así, como identificando cuáles son los puntos que están generando conflicto? 

Daniel: En una curva, están en un extremo las parejas que están hechas el uno para el otro y que les cuesta muy poco llevarse bien y todo les sale bien como pareja; en el otro extremo están las parejas que no fueron hechos para vivir bajo el mismo techo, por más que les ayudes y les busques y veas cómo le hacen; pero en el centro está la gran mayoría de parejas, que haciendo su parte, su esfuerzo, aprenden, y siendo flexibles sobretodo, aprenden a convivir de una manera satisfactoria.

Adrián: Bien. Pues ¿Te parece bien, Daniel? Vamos a hacer una pequeña pausa, vamos a acompañar a acompañar a este recorrido por las pinturas rupestres que hay por allá muy cerca de Tecate, y regresamos a platicar sobre cuáles son los puntos en los que hay que poner énfasis en ese sentido.

Daniel: Sí, porque te quiero contestar la pregunta de si vale la pena que vaya uno solo.

Adrián: A ver pues vamos a hacer esa pregunta al momentito. Bien, vamos con Fer. Esto es Hablemos de Baja.

Seguimos escuchando este álbum que es Lágrimas negras  en donde coinciden estos dos intérpretes, uno al piano, que es Bebo Valdes y el intérprete cantante que es Diego el Cigala. De vuelta ya platicando con Daniel, Daniel Vázquez, él es especialista en terapia de pareja, es psicólogo especialista en terapia de pareja.

Terapia de parejas con uno solo

Daniel ¿Sirve que uno de los dos vaya a terapia, que uno tome la iniciativa? ¿Va a jalar al otro? ¿Cómo se va a dar eso?

Daniel: Sí, está buenísima la pregunta y es una duda muy frecuente, y la mitad de mis clientes son individuales, trabajando en problemas del matrimonio, y la otra mitad van los dos juntos.

Sí, sí ayuda que vaya uno solo. La realidad es que la mitad de las veces uno de ellos no quiere, o porque no puede o porque no le interesa o porque te dice simplemente ¿Sabes que? el del problema eres tú, ve tú. Pero muchos, o muchas personas, dicen Pues no, no voy si tú no vas, porque tenemos que ir los dos, porque sino ¿de qué sirve? Sí sirve de mucho.

Adrián: Que uno vaya.

Daniel: Sirve de mucho que uno solo vaya ¿Por qué? Porque, uno, están en un bache que ya los rebasó. Ya fueron rebasados por el bache, no terminan de entender qué pasa y yo los voy a ayudar precisamente a entender la situación, a entender su propia postura, a entender la postura de su pareja y cómo empezar a manejar la situación de una manera que gire en una dirección más productiva, es decir, cómo apuntar hacia afuera del bache.

Señales para acudir a terapia de parejas

Adrián: Eso es importante ¿Y cuáles podrías considerar; ya nos quedan unos cuantos minutitos, los puntos de alarma para pensar en acudir a esta terapia de pareja?

Daniel: Ok. Uno, cuando se repiten cuando hay discusiones frecuentes. Que discuten una vez a la semana, fuerte.

Adrián: Que no haya así como que acuerdo ni nada.

Daniel: Ajá, que empiezan a salirse de control las peleas, que se empiezan a faltar el respeto, o muchas veces, que ya empiezan los jaloneos. Inevitablemente, si no aprenden a cortar las discusiones cuando ya se están poniendo calientes, van a llegar a las cachetadas.

terapia de parejas

Y lo digo de tanto mujeres como hombres, no es Ay, el hombre es el violento siempre No. Las mujeres también, cuando se enojan ¡Zas! de repente empiezan los jaloneos, los empujones, y allí ya es un foco rojo que hay que atender.

Adrián: ¿Cuál sería la siguiente? Digamos ¿Cuando se empiezan a tener conflictos que sean…?

Daniel: Cuando se sienten distanciados ¿no? Empieza a haber cierto distanciamiento y empiezas a dudar de tus sentimientos o de tu propio compromiso, o sospechas, o ves a tu pareja distante o ya no comprometida como antes.

Adrián: Correcto ¿Y en ese momento es que deben de tomar la decisión de acudir a terapia?

Daniel: Sí, para revisar qué está pasando, qué hay que cambiar para estar más a gusto, para sentirse más comprometidos, para reavivar esa chispa ¿no? La chispa se puede mantener viva todo el tiempo.

Adrián: ¿Y eso es lo que va a buscar la terapia?

Daniel: Exactamente.

Conclusión

Adrián: Bien, Daniel, pues estamos llegando al final. Entonces podríamos decir que en el momento cuando los problemas no se puedan resolver de manera sencilla en casa, es el momento de acudir a terapia.

Daniel: Así es.

Adrián: Bien Daniel ¿Dónde pueden buscarte si es que requieren esta ayuda? ¿Cómo pueden encontrarte?

Daniel: Estoy para atenderles en Facebook, con mi nombre Daniel Vázquez Montaño; Estoy en Cosasdepareja.com, ahí están mis datos, hay también artículos, hay videos que pueden ayudar a orientar antes de que yo los atienda; y mi teléfono es 6643036711. [81 8421 7355 Whatsapp]

Adrián: Bien, 6643036711, [81 8421 7355 Whatsapp] Cosasdepareja.com.

Daniel: Así es.

Adrián: Para que tomen nota y bueno, pues estén atentos si es que identifican alguno de estos problemas en casa. Bueno, pues ya hemos llegado al final, muchísimas gracias, Daniel.

Daniel: A ustedes, por la invitación.

Adrián: Es así que llegamos al final de esta emisión de Baja por tu salud. Nos vemos el próximo lunes a través de esta frecuencia 950 de AM que es Radio Fórmula. Quiero agradecer al equipo que hace posible esto, a la doctora Josefina Huerta, a Israel en los controles, a Fer en las colaboraciones y a ustedes. Nos vemos el lunes aquí en Baja por tu salud, yo soy Adrián.


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